La
Sillería Baja del coro de la Catedral de Toledo.
Misericordias.
(TERCERA PARTE)
BESTIARIO.
La
sustitución del ser humano por un animal fue uno de los procedimientos
medievales mas utilizados para convertir una escena en cómica; el parecido del
mono con el hombre le favoreció en ese papel llegándose a convertir en uno de
los principales protagonistas de las "drôleries" [bromas o burlas] de
los márgenes de los manuscritos góticos. Así en una misericordia de la sillería
baja del coro de la catedral de Toledo se presenta a un mono con su cría a la espalda que da de
comer a una lechuza.
[Aunque
hay que reconocer que no siempre la relación entre los animales fue tan
amigable, como puede verse en el fragmento adjunto, folio 161r, del manuscrito
Douce 5 -también un salterio de hacia 1320-, conservado en la Bodleian Library]
Los
monos, según Ovidio, personificaban para los griegos toda clase de vicios, e incluso el Physiologus les identificaba
con el demonio. En una misericordia de la sillería toledana aparecen tres monos
de espalda leyendo; de difícil interpretación es su simbolismo a no ser que al
estar en quehaceres humanos responda al género artístico conocido como "el mundo al revés".
En otra misericordia se representa a una cerda hilando acompañada de dos monos. El cerdo
iconográficamente suele ser considerado como símbolo de la lujuria y de la
gula, y el mono según Guy de Tervarent "Símbolo de la lujuria, ocupa a
veces el lugar del cerdo como imagen de este vicio"; además las mujeres
"hilando" o con el huso próximo a ellas solían caracterizar a las "mujeres de escasa virtud".
Una
misericordia cuyo tema repetiría Rodrigo Alemán en la sillería de la catedral
de Ciudad Rodrigo presenta a una osa con su osezno comiéndose una
colmena. Para Isabel Mateo podría simbolizar a los "oportunistas" en
base a unos versos de las "Coplas de Di Panadera" casi contemporáneos
a la ejecución de la sillería; no obstante la historiadora recuerda el refrán
medieval "A donde halló un panal vuelve el oso a husmear" donde se
alude a los curiosos, los que con disimulo buscan enterarse de las cosas de los demás.
Casi
todos los Bestiarios medievales contaban de la misma manera las costumbres del
castor. Asi, p.e., se dice en el "Li
Bestiaires d'Amours di Maistre Richart de Fornival e li Response du
"Bestiaire": "El
castor es un animal que posee un miembro que encierra una medicina, y al que
cazan para apoderarse de tal miembro. Huye tan aprisa como puede; pero cuando
ve que ya no puede escapar a la persecución, tiene miedo de que lo maten ...
sabe perfectamente que sólo lo persiguen a causa de aquel órgano: aferra, pues,
tal miembro con los dientes, lo arranca y lo deja caer en medio del camino; y
cuando el cazador lo encuentra, deja ir al castor, pues no se le caza más que
por eso. Así, ..."; luego en cada Bestiario se moraliza en forma
distinta pero en general convirtiendo al castor en símbolo del hombre que
prefiere privarse de lo que más aprecia para evitar el peligro.
El
dragón es una de las bestias representadas con más prodigalidad en las
sillerías de coro y la de Toledo no podía ser menos. Si bien sus variantes
anatómicas son muy acusadas una de las descripciones más común es la de mostrarla como una
gruesa serpiente con alas, garras y patas de cuadrúpedo; las variantes
iconográficas derivan de las narraciones bíblicas y de la imaginación del
artista que las tallaba.
Con una iconografía cercana a la de los dragones en una misericordia de la catedral se representa a tres animales fabulosos; la dificultad de su identificación convierte en harto difícil el atribuirles un significado concreto. Su aspecto hace que se les considere como prototipos de maldad.
Otra
misericordia similar a la anterior, aunque algo más deteriorada, presenta a dos
animales peleándose a lomos de un cuadrúpedo de fiero aspecto; en los casos de
misericordias en que se representan seres humanos cabalgando sobre animales
suelen simbolizar a un vicio concreto. También en la literatura de la época,
tal como el "Libro de los Enxemplos"
o algunos Bestiarios, se asocia a estos monstruos o animales fabulosos con la
muerte o con signos de malos presagios. No obstante y como señala Baltrusaitis
al significar el papel transmisor de gemas o monedas en temas iconográficos
-"La Edad Media veneraba las piedras grabadas, pero también gustaba de las
antiguas piezas de plata y oro"-, la escena puede carecer de un significado
concreto y haberse buscado por el artista la forma por la forma o ser
consecuencia de un modelo en que se representase una escena de caza en el que
los perros se abalanzaran sobre su presa.
Uno
de los motivos de inspiración habituales de los entalladores tardógóticos eran
los temas que reflejaban alguna faceta de la actividad humana.
DE
LA VIDA COTIDIANA.
Las
enfermedades, al desconocerse las causas que las producían, solían considerarse
como "castigo divino". El artista tallaba, para aludir a ellas, figuras con defectos
físicos o deformaciones como podían ser los jorobados o los cojos; es el caso
de una misericordia en la que aparecen dos hombres con jorobas manteniendo una
conversación. Isabel Mateo piensa que también puede referirse la escena a los
judíos, abundantes en el Toledo de la época, y que se habituaba a caracterizar resaltando algunas peculiaridades físicas tales como la nariz aguileña o la
joroba.
Isabel
Mateo, en cambio, interpreta la escena como la de una pareja de damas jugando a
los naipes y recuerda que el juego de naipes fue uno de los más prohibidos
durante la Edad Media, así como que sirvió como entretenimiento de damas y de
tugurios. San Isidoro, muy radical, interpretaba que en los juegos de azar
"nunca falta el engaño, la mentira,
el perjurio, el odio, y los daños que se sufren".
La
profesión médica se halla representada en una misericordia de la sillería de
coro mediante una figura que machaca en un gran mortero y otra que
probablemente sostenía una probeta.
Fernando
López-Ríos recuerda que San Isidoro, en el libro IV de las
"Etimologías", al hablar de los instrumentos médicos señala la "pila"
-o mortero grande-, que se usaba para golpear las drogas y los morteros más
pequeños donde se realizaban las mezclas. En el folio 154v de un manuscrito de
la "Chirurgia" de Guy de Chauliac de 1461 -conservado en la BNF
bajo el código Latín 6966- se representa a un médico entre un farmacéutico que
machaca en un mortero y un herborista que recoge plantas en un jardín.
A
finales del siglo XV Toledo era un núcleo comercial importante en España. Es
probable que en una misericordia en la que dos hombres transportan, apoyándolo
en los hombros, un baúl se aluda al oficio de los mercaderes.
En
la primera misericordia de la sillería del lado del Evangelio se presenta a un
hombre, con una vestidura talar, que azota a una oveja
que camina a su lado. Para Isabel Mateo tal vez aluda al pueblo oprimido por
los poderosos en base a un texto atribuido a Gonzalo Martínez de Medina en
donde se dice refiriéndose a la corte del rey "donde hay tanta malicia que no puede ser contado y donde cualquier
oveja se ve acometida por mil engaños".
Un
ejemplo de la dificultad que supone identificar el contenido de las tallas que
figuran en las misericordias puede ser el de una ménsula, algo mutilada, donde
aparece un hombre con un asno.
Para
Isabel Mateo -que cree que el hombre lleva bajo el brazo un tambor-, escenifica
la siguiente "Fábula de Esopo": "Un comprador se fue por un camino con un asnillo a gran prisa por
llegar a una feria, hiriendo a menudo su bestia con el azote para que llevase
la carga más presto y ganase en ella. El asno, viéndose cargado y azotado y
caminando lejos y más que sus fuerzas alcanzaba, deseaba la muerte pensando
estar seguro después de muerto. Y así, quebrantado y cansado murió, pero aún
después de muerto, hicieron de su cuerpo panderos, que son siempre golpeados.
Esto quiere decir que ninguno piense que está a salvo".
Israhel
van Meckenem copió un grabado -copia
invertida-, de Martin Schongauer (L. 88) que representa a "un molinero con una burra y un pollino"
(Lehrs 471); bajo su brazo derecho sujeta el molinero, vestido con ropa corta
ceñida por un cinturón del que cuelga una bolsa de dinero, un tamiz. Para
Dorothee Heim el grabado de de Israhel van Meckenem era conocido por el maestro
Rodrigo Alemán quien llevó esta composición, aunque algo simplificada, no sólo
a la misericordia de la sillería de Toledo sino también a una de Plasencia.
En
una misericordia de la sillería dos hombres contemplan las páginas de un libro
al tiempo que uno de ellos parece actuar con una prensa. Si recordamos que
Gutemberg murió en 1468 y la afición del maestro Rodrigo a la utilización de
grabados como modelos para sus esculturas podemos suponer que estemos ante la
representación del "oficio" de impresor.
Es
habitual hallar en las sillería de coro representaciones de oficios artesanos.
Así, en la sillería de Toledo figura un escultor, gubia en mano, que talla una
imagen mientras otro hombre de espaldas (¿el comprador?) habla con él. Rodrigo
Alemán repetirá el motivo en la sillería de Plasencia.
No
es frecuente la presencia de temas religiosos en las misericordias de las
sillerías por el escaso espacio que ofrecen y según Bond por el rechazo del clero
a que estuvieran dispuestas en un lugar tan poco distinguido. Cuando aparecen lo
hacen asociados a temas profanos de la época como forma de presentar lo bueno y
lo malo que caracteriza la vida humana; aunque en el caso de la sillería de
Toledo la presencia de los dos temas religiosos puede que tengan que ver con la
formación temprana del maestro Rodrigo, con lo que conoció antes de su llegada
a España.
En
la iglesia de Santa Catalina en Hoogstraten (Bélgica) junto a la "nueva"
sillería de coro, en el brazo norte del crucero existe otra conocida como
"pequeña sillería" de tan sólo ocho estalos realizada con restos de
la antigua sillería; de las seis misericordias que corresponden a la obra
original cuatro presentan motivos que aparecen en Toledo, y dos de estas muestran temas
religiosos.
En
una misericordia de la sillería de Toledo aparecen dos hombres llevando un
gigantesco racimo de uvas. Hace referencia a un pasaje de la Biblia del Libro
de los Números [13]; como Yavé hubiera ordenado a Moisés que enviara al más
importante hombre de cada tribu a inspeccionar la tierra de Canaan este les
dice: "Animaos y traed algunos
frutos de esa tierra. Era esto en el tiempo de las primeras uvas... Llegaron
hasta el valle de Escol, cortaron un sarmiento con racimos de uvas, que trajeron
dos en un palo".
Un
hombre que lleva dos grandes tablones al hombro se representa en una
misericordia; corresponde a un pasaje del Libro de los Jueces [16, 1-3] :
"Fue Sansón a Gaza, donde había una meretriz, a cuya casa entró. Se les
dijo a las gentes de Gaza: "Ha venido aquí Sansón". Y le cercaron y
estuvieron toda la noche en acecho cerca de la puerta de la ciudad. Se
estuvieron tranquilos durante la noche, diciéndose: "Al alba le
mataremos". Sansón estuvo acostado hasta media noche. A media noche se
levantó, y cogiendo las dos hojas de la puerta de la ciudad, con las jambas y
el cerrojo, se las echó al hombro y las llevó a la cima del monte que mira
hacia Hebrón".
La
incorporación de los motivos de la "pequeña sillería" de Hoogstraten
en la sillería de Toledo le parece a Dorothee Heim una firme indicación del
origen Brabantino de Rodrigo Alemán, al menos en lo artístico, por lo que sería
en Brabante donde habría que buscar la formación del entallador.
BIBLIOGRAFÍA.
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XXXII, Valladolid 1966.
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-Jurgis
Baltrusaitis, "La Edad Media fantástica", Madrid 1994.
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-Dorothee
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68, nº. 270, Madrid 1995.
-Dorothee
Heim, "La sillería del coro de la catedral de Toledo y la recepción de los
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-Dorothy
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-Fernando
López-Ríos Fernández, "Arte y medicina en las misericordias de los coros
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-Ignacio
Malaxecheverría (ed.), "Bestiario Medieval", Madrid 1989.
-Isabel
Mateo Gómez, "Temas profanos en la escultura gótica española. Las
sillerías de coro", Madrid 1979.
-Isabel
Mateo Gómez, "La sillería baja de Rodrigo Alemán", en Cat. Exp.
"Ysabel la reina católica. Una mirada desde la Catedral Primada",
Toledo 2005.
-Isabel
Mateo Gómez, "La sillería del Coro de la Catedral de Toledo", Temas
Toledanos, Toledo 1980.
-Isabel
Mateo Gómez, "Temas iconográficos interpretados por el maestro Rodrigo
Alemán en la sillería de la catedral de Toledo", Revista Goya nº. 105,
Madrid 1971.
NOTAS.
-La
miniatura del folio 154v del manuscrito Latin 6966 en que se representa a un
médico puede verse en color, por internet, en la biblioteca numérica Gallica de la BNF.
-Las Fábulas de Esopo en castellano, edición Steinhowel de 1521, pueden leerse por internet en la Librería del Congreso de USA.
(cont.)
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¡Muchas gracias por este interesantísimo artículo! Y enhorabuena por el blog, muy recomendable.
ResponderEliminarMuchas gracias a usted por sus palabras.
ResponderEliminarSaludos cordiales